04 octubre 2007

El fin de una Era

Acabo de leer hace un rato que Zombieguide se cierra sus puertas. Para la mayoría esto no supondrá ningún trauma (en realidad, para mi tampoco, no te vayas a pensar). De hecho, casi seguro que tu única relación con esa web es el link que hay a la derecha de este blog.

Hace unos años Zombieguide era una web más dedicada a The Cranberries. A mí, personalmente, era de las que menos me gustaba. Era más papista que El Papa. Demasiado oficiosa para mi gusto. Cuando te bajabas un mp3, siempre acababa jodido por un “sambigaid dot com”(zombieguide.com) pronunciado por una voz de ultratumba.

En 2002, The Cranberries publicaron su último disco, hicieron una gira, y como ya se veía venir, a principios de 2003 confirmaron oficialmente que se tomaban un descanso (ahora se dice así).

A partir de entonces, la mayoría de las páginas dedicadas al grupo fueron olvidadas por sus webmasters. Poco a poco fueron perdiéndose los dominios, y Zombieguide fue la única que quedó en pie, y además actualizada regularmente.

A principios de este año, con el resurgimiento de Dolores O’Riordan, la cosa se animó. Volvieron a crearse webs. Hubo variedad, nuevos puntos de vista, iba a decir diferentes, pero en realidad la mayoría son satélites, pero bueno... ya nos podíamos conformar.

Zombieguide abrió una sucursal dedicada a la Lola, estuvo operativa algo así como un mes, y se acabó lo que se daba. Y aquí empezó el problema. Esta sucursal tenía un dominio muy goloso: doloresoriordan.com. La Dolo le pidió amablemente al webmaster de Zombieguide (a donde eras redirigido desde esa dirección) que le dejase ese dominio para ella. Tiene su lógica la cosa, y seguro que le ofreció algún dinerillo a cambio. Pero el webmaster en cuestión se ve que se negó, y la Dolores en cuestión le demandó.

Y ahora llego al fin de la historia. El webmaster ha decidido que después de promocionar a The Cranberries, primero, y a Dolores O’Riordan, después, invirtiendo un montón de esfuerzo y tiempo, sin exigir ni obtener nada a cambio, no es justo que encima le denuncien. Así que se ha cabreado, y ha cerrado el chiringuito.




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